¿Grasas?
Recientemente publicaron un estudio de la Universidad de California donde explica que lo que hace irresistible los alimentos grasos no se debe a su brillo, color o la textura que éste le genera, no se debe a que los carbohidratos sean adictivos.
Según el estudio, cada vez que se consume los alimentos grasosos nuestro intestino produce ciertas sustancias que generan un efecto muy similar al que produce la marihuana; que crean ansia por consumir más y resulta que no sucede así con azúcares ni proteínas aunque estén en los procesos fisiológicos como el hambre, la sensación de dolor o la memoria.Esta investigación, llevada a cabo por el Doctor Daniele Piomelli y publicada en Proceedings of the National Academy of Sciences, revela que las células del aparato digestivo comienzan a producir dichas sustancias llamadas endocanabinoides, que al estar en contacto el alimento con la lengua generan una señal que va al cerebro y luego a los nervios desde la faringe hasta el intestino donde se estimula la producción de dichos componentes y con ellos el ansia por consumir más alimentos grasos.
Este mecanismo explica el profesor en farmacología, podría ser una respuesta evolutiva de los mamíferos, ya que son escasas en la naturaleza y los animales las necesitan para el adecuado funcionamiento de sus células, para sobrevivir; pero ahora están muy disponibles y esta necesidad de consumirlas ha llevado a la obesidad, diabetes y cáncer.
Hoy en día con la tecnología tan avanzada, se facilita la comunicación a grandes distancias, la información, la libre expresión pero se nos olvida que entre más tiempo dedicamos a informarnos, comunicarnos, revisar páginas sociales tenemos más tiempo de inactividad física.
¿Alguna vez has bebido de una botella de aceite? ¿Has imaginado comerte una barra de mantequilla? Para muchos de nosotros eso, no es siquiera apetecible, sin embargo, algunas preparaciones pueden llevar incluidas esas cantidades de grasa, y ni siquiera nos percatamos.
No es sólo cuestión de estética si no de conciencia y amor a nuestras arterias y al buen funcionamiento de nuestro cuerpo en general, deberíamos conocer los beneficios y perjuicios de la grasa en nuestra dieta.
IMPORTANCIA DE LAS GRASAS EN LA ALIMENTACIÓN
El descubrimiento de la importancia de los lípidos en una nutrición sana es un proceso que se inició a partir de los años veinte. Anteriormente se creía que la grasa no desempeñaba un papel esencial en la alimentación si se consumían cantidades suficientes de vitaminas y minerales con la dieta. Sin embargo hacia el año 1918 se propuso que la grasa tenía un valor nutritivo que no podía ser suplido por otros componentes de los alimentos. Posteriormente, documentaron la existencia de una sustancia esencial en la grasa: el ácido linóleo (C18:2 n-6), señalando que en ausencia de este nutriente se desarrollan síntomas que afectan la salud de la piel, retención de agua, fertilidad y crecimiento.
Posteriormente se prestó atención a la relación existente entre cantidad y tipo de grasa consumida y el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, cáncer y otras enfermedades degenerativas. El mensaje principal que resultó de estos estudios llevó a aconsejar moderación en el consumo de grasa total, grasa saturada y colesterol. En los últimos 10 años muchas fracciones lipídicas han recibido atención al comprobarse su importancia en la prevención de diversas patologías y deterioros.
Las investigaciones realizadas y el desarrollo de alimentos enriquecidos con estas fracciones lipídicas (ácidos grasos omega-3, esteroles vegetales...) abren nuevos caminos en la búsqueda de una mejora de la salud y calidad de vida, por modificación en el consumo de grasas
Flujo de sangre al corazón se dificulta tras comida grasosa
NUEVA YORK (Reuters Health) - El consumo de una sola comida rica en grasa puede interferir con el flujo sanguíneo que alcanza al corazón en hombres jóvenes y saludables, reveló un estudio.
Aunque ya se sabía que el consumo de por vida de comidas grasosas podía conducir a un ataque cardíaco, este nuevo estudio indicó que bastaba una sola comida grasosa para afectar al corazón.
Todos los hombres se sometieron a una prueba de corazón y se les tomaron muestras de sangre antes y después de consumir la comida líquida.
Los investigadores, dirigidos por Takeshi Hozuml de la Universidad de la Ciudad de Osaka en Japón, hallaron que cinco horas después de una comida rica en grasa, la capacidad de las arterias cardíacas de expandirse y aumentar el flujo sanguíneo al músculo, una medida conocida como reserva de flujo coronario, disminuyó en un 18 por ciento.
Además, cinco hombres se sometieron a las mismas pruebas después de consumir una dieta de 1.200 calorías baja en grasa que contenía sólo 10 gramos de grasa.
En ese caso los hombres no tuvieron una disminución en la reserva de flujo coronario después de consumir la comida, según el informe de la edición de abril de la revista Annals of Internal Medicine.
Los hallazgos indican que la microcirculación coronaria, los delicados vasos sanguíneos que aportan sangre rica en oxígeno al músculo cardíaco, puede alterarse por una comida rica en grasa.
Aunque el estudio no incluye gente con cardiopatía, los resultados podrían orientar para saber por qué en las personas con el dolor en el pecho relacionado con cardiopatía, llamado angina, aumenta el dolor después de una comida rica en grasa.
En fin las grasas evidentemente no son buenas aunque si adictivas y es completamente imperiosa la necesidad de buscar alternativas para combatir sus afectos en nuestros organismos.
Reducir el consumo de alimentos fritos cambiarlos por otros tipos de cocción como al vapor, al horno, o simplemente salteado con poco aceite; aumentar los vegetales, frutas, adoptar rutinas que incluyan más actividad física son algunas de las recomendaciones básicas que debemos tomar en cuenta.
Cada uno tome sus propias conclusiones, se despide afectuosamente esperando que les haya gustado ésta recopilación
Elizabeth Bonilla V.
http://ultimaadvertencia.blogspot.com/2008/01/corazon-y-consumo-de-comida-grasosa.html
